Empiezo a escribir esto a las diez de la noche con diez minutos.
Dentro de poco, será una navidad más a celebrar, regalos, abrazos, besos, buenos deseos y sentimientos a flor de piel. Hoy me quedé en casa, como un Grinch, como un "amargado", como alguien que no disfruta la compañía de su familia en una noche como hoy.
No es que eso sea cierto, la verdad es que amo mucho a los míos, pero creo que cabe mencionar lo que la "navidad" viene a ser para nosotros en comparación con otras personas.

Es triste escuchar o leer notas de personas en diversas partes del mundo que no tienen para comer siquiera, que sus pies calzan trozos de plástico antes de un buen par de zapatos, que sus juegos de vídeo son rocas llenas de polvo, que sus cenas de nochebuena son roedores recién cazados, que no pueden recibir un fuerte abrazo porque sus huesos están tan descalcificados que morirían, que nadie se atreve a besarles porque están colmados de enfermedades contagiosas, que no cantan villancicos porque sus fuerzas apenas y les dan para respirar, que no beberán licores porque el agua es escasa y muy valiosa, que no escribirán cartas a Santa Claus, El niño Dios o los reyes magos; porque jamás nadie les ha contado esa historia que para ellos, debería ser una total falacia, pues jamás les han llenado de dicha esos días en el pasado. Además, ni siquiera saben escribir, menos leer esto que escribo.

Son gente que se esfuerza por el permanecer con vida día a día, hoy y los trescientos sesenta y cuatro restantes del año, son gente que no va a la escuela, y su supervivencia consiste en no ser devorados por un depredador entre la jungla, son personas humildes, de quien sus sonrisas son tan escasas que deberían ser captadas en libros Guiness.

Hoy me quedé en mi casa, porque sé que no soy el único sumergido en soledad, pero sé que tengo un refugio para dormir seguro, alimento para echar a mi boca y nutrirme, ropa y calzado para no andar por ahí desnudo, y el valor del conocimiento del leer y escribir.

Sé, que tampoco soy el único que se acuerda de esas personas en estas fechas, sé que muchos creen en Dios y antes de sus cenas navideñas dan gracias pronunciando un "Señor, bendice a quienes no tienen" para despejar sus almas un poco, sé que ellos merecen ser recordados y mencionados no solo en tiempos buenos y de deseos agradables, sino en todo momento, porque me parece injusto que una instancia de naturaleza me haya puesto en manos de una familia con capacidad de alimentarme y vestirme cuando alguien más, en un sitio recóndito ha vivido bajo el yugo de la miseria.

Bueno...
Después de explayarme un poco, quiero desear a esas buenas personas que se han acordado de mi, a aquellos que en cualquier momento de necesidad que he tenido me han dirigido un saludo, un abrazo, un beso. Caray, muchas gracias por estar ahí siempre, para mí; sé claramente que no soy un amigo común al que presumen con constancia, pero soy y existo de un modo en que ustedes consideran.
Por cierto, este años que está por terminar y del que algunos creyeron no saldríamos, este año que muchos deberán estar celebrando en este instante, este año ha sido por completo de bendición... Me he enamorado, he hecho amigos, he dejado atrás malas costumbres, he mejorado, me he desenamorado, me he fortalecido, he ampliado mi consciencia y he luchado.

Desde aquí les dejo a esas personas que me han ayudado ya sea directa o indirectamente a salir adelante y bueno, les pido con todo mi corazón que en sus plegarias jamás olviden mencionar a esos que no tienen, a esos que carecen, a esos que necesitan, porque quizá nosotros no podemos evitar el hambre y todos los males del mundo, pero sí podemos, si siempre los tenemos en mente, llegar a ser grandes personas que en un futuro ocupen puestos importantes y quién sabe, capaz y haya entre nosotros alguien con la influencia suficientemente grande para apoyarles; por lo pronto, solo queda tener fe en Dios (o en lo que cada uno crea) y pensar buenos deseos para los hermanos necesitados.

Bien, eso es todo, me voy a continuar pasando mi noche en completa soledad y meditación...


Nota

Por
Empiezo a escribir esto a las diez de la noche con diez minutos. Dentro de poco, será una navidad más a celebrar, regalos, abrazos, besos, ...
Publicaré esto que Angélica Morfín una vez me dijo:

"Qué hermoso ha sido y es encontrar gente como tú, tan sincera, tan tú; con cualidades preciosas inteligente y de un corazón preciosísimo; Soy afortunada de conocerte, porque en verdad te creo y en verdad te siento; Dicen por ahí que ninguna persona llega por casualidad a tu vida, que aunque sabemos bien que pudiera ser una vil mentira capitalista o religiosa, algo que la ciencia no comprende; Yo creo que realmente es así, he aprendido mucho de ti, aunque a veces te odie, a veces te quiera, a veces sienta que no he sido lo suficientemente amiga en equidad de amigos, eres una persona interesante, de la cual aprendo, y disfruto aprender.

Agradezco siempre tus palabras, y tu amor, que lo siento desinteresado y muy noble, de verdad puedo ver a las personas, contigo puedo ser y soy, y tu conmigo creo que eres; Yo te quiero eso es verdad, pero se me hace justo aclarar que no lo hago mas allá de una amistad; sabes que mi máxima meta es que yo misma me ame con pasión y con locura, y ya lo comienzo a hacer.

Y a mi forma de ver, tú tan perfecto y egocéntrico que aveces solo aveces eres, creo que tienes un defecto, el peor de todos los defectos sobre la humanidad y sobre el universo; y es el defecto de no verte a ti mismo tal cual, de no valorarte lo suficiente comenzando desde ti y después gritándolo a los cuatro vientos. ¿Hasta cuándo vas a estar así? Ciego ante ti mismo, conformista y derrotado, viviendo la mentira más estúpida que puedes haber conocido, "tu falso realismo" de tu realidad terrible y destruida; y sabes que me harta que no te valores, que no te veas, que sientas que no te puedes levantar ante la vida y mejorar ese estúpido autoestima que conoces tan bien.

Eres un pinche flojo engañado, te engañas a ti mismo de lo que no eres, y escondes la mejor parte de ti, lo que sí eres, lo que en verdad eres, un triunfador, un encanto, un hombre con mucha testosterona y atractivo; atento, y seguro de ti mismo, hasta cuando vas a ir por la vida haciéndote pend... ¿crees que a mí me engañas? ¿Que no puedo ver el superhombree que hay en ti? También puedo ver tu seguridad y tu arrogancia de una manera que me impresiona, te aconsejo como mujer, como amiga, y como tipa existencialista y también común y corriente, que te dejes fluir, que te dejes conocer, que dejes que el mundo te conozca realmente, y que por favor seas, tal cual eres; se que lo vas a lograr, es fascinante todo lo que puedo ver en ti, seguro que tú te regocijas en tu maravilla; por favor no nos quites ese deleite, deja de arrebatárselo a tu espejo, deja de negarlo y gritarlo con palabras, que no funciona. Tarde o temprano tienes que salir de esa cajita en donde te escondes, tarde o temprano tienes que ser, y cuando ese día llegue estoy segura que te veré nadando en alegrías puras y frescas, con mucho amor a ese al que tanto odias, con la chica que quieras a tu lado.

Yo no te voy a decir que es lo que tienes que hacer, eso tú ya lo sabes muy bien. Así que tú decides si en el plano personal, te quedas viendo sentado en el pasto pasar a los triunfadores o si te levantas y te vas con ellos a vivir tus sueños... esos sueños de ese corazón bonito y de esa mente brillante, capaz de hacer de su propia persona y vida completa maravillas.

En lo demás te agradezco infinitamente, tu sabes que te quiero, y que tus bonitas palabras son como señales, era algo que necesitaba, las agradezco y las valoro. Y si me quieres dar un buen regalo de cumpleaños, piensa lo que te dije. A mí realmente no me importa tu vida, pero mira que si te viera feliz si viera al Carlos que en verdad eres, me vengo... pero de mi casa para ir a visitarte y disfrutar de tu verdadero yo, ese que si quieres ser, a ese que ya eres."

Hasta ahí es todo, es tan hermoso que quise recordarlo a mí mismo de algún modo, y qué mejor que en mi propio blog; ahí nunca perecerá.

Hay personas en nuestras vidas todo el tiempo, pues somos sociables por una razón, hay personas a las que amas y personas a las que odias, hay personas a las que acudes en busca de consejo y personas a las que ignoras, hay personas con las que te sientes identificado y personas que se identifican contigo. 

Ayer quería escribir algo, quería dejar fluir el amor que siento, esas palabras que me han escrito han cambiado mi manera de pensar y ver la vida. Yo sé que estamos siendo usados, trabajados, programados, fastidiados y abatidos con un propósito; pero tengo que admitir que la gente es feliz así, a muchos les fascina su vida hundidos en la ignorancia, y de hecho ayer me preguntaron qué escogería entre ser un genio consciente de todos los desastres o un tonto feliz, yo respondí que me gustaría ser el tonto, pues, en su pequeñísimo mundo donde él mismo es su centro la felicidad es sobreabundante, no hay nada de qué preocuparse ni nada por qué llorar, es simplemente felicidad, todo, y en todo.

Gracias a Dios, primeramente, sigo vivo, quien no crea en Dios está en todo su derecho, yo creo en lo que yo quiero; y prefiero estar bien para con alguien, si es él, mucho mejor. Gracias mundo.


Angélica

Por
Publicaré esto que Angélica Morfín una vez me dijo: "Qué hermoso ha sido y es encontrar gente como tú, tan sincera, tan tú; con ...
Mientras algunos ventilan sus vidas pasionales, sus derroches emocionales (coff), sus supuestos triunfos, sus egos y más egos, lo cierto es que a todos nos hace falta expresarnos de algún modo. Llámenlo necesidad o simple exhibicionismo, el punto es que todos tenemos algo qué contar, aunque obviamente no todos somos bien recibidos por el público conocedor. Pero es que, hay que saber diversificar entre lo que es un "buen" público, y lo que son "las masas".
Las masas, desde mi opinión, son ese montón de gente que anda de aquí para allá buscando en qué perder el tiempo mientras pseudonavegan por Internet, sin conciencia, ni lógica, solo van a donde ven visitas. A mí jamás me podrán contar en ese montón (Oppan gangnam style!), pero, aunque pocos nos damos cuenta, es hasta en esos lugares donde cada vez cobra mayor fuerza el control de las masas. Pues tú ves lo que hacen y hasta te burlas de ellos, porque siguen como ovejas un sendero prediseñado, viven adaptándose a un esquema que ya existe, hacen lo que deben de hacer incluso en los cabales tiempos de libertad de la red. Eso no existe, jamás ha existido.
Los blogs, desde mi opinión, hoy más que nunca necesitan ser y yo sé que hay, que existen muchos, pero se centran demasiado según mi opinión, en el compartir contenidos, el pasar cadenas (memes), en el no crear porque eso quizá ya existe. A mí no me importa que vengan y me reclamen porque he choteado una idea que alguien más ya publicó, qué bueno, en ese tipo de cosas es donde se nota que se puede hacer lo que sea sin temor a ser juzgado o mejor dicho, siendo justificado por el fin mismo.
Yo quiero blogs, me gusta leerlos, recordar a los amigos, a esas buenas personas que me he encontrado en mi andar por la vida, a esos seres formidables a quienes les he aprendido tantas buenas cosas, me agrada, en verdad. Algunos dicen que un sitio como este, apartado de lo noticioso y farandulero no tiene futuro, y caramba, probablemente sea cierto, pero tiene un presente y un pasado bastante claros, porque no está fundado en el amarillismo, despotismo, memeismo (palabra nueva), instantismo o tendencionismo; sino que a sí mismo se va construyendo su propio camino. Eso amigos, es esencia, y la esencia es algo que no surge de la nada, sino se cultiva con el día a día.

Ah sí, ya salí de vacaciones, he tenido un noviembre y diciembre bastante complicados pero todo indica que el año que viene, quizá aunque no sea mejor, estaré más relajado.

Blogs

Por
Mientras algunos ventilan sus vidas pasionales, sus derroches emocionales (coff), sus supuestos triunfos, sus egos y más egos, lo cierto es ...
Hoy es de esos días en los que siento la necesidad de escribir sin darme cuenta que en realidad no sé de qué hacerlo. Mientras divagaba, pensaba en la clase de persona que quería ser a mi edad, hace algunos años. No soy nada semejante.

Cuando era niño estaba ansioso por descubrir la vida, quería que todo lo bueno me ocurriera enseguida, me veía casado a los dieciocho; a mis veinticinco ya ilusionaba con tener algún hijo. Me veía completamente independiente, amando las cosas bellas de la vida, me veía trabajando en alguna empresa recibiendo buen sueldo, me veía entonces portador de un automóvil, me imaginaba que la vida era más sencilla, mucho más. Cuando era muy niño era delgado, siempre supuse que eso no cambiaría. Era honorífico en mis notas, las personas me halagaban todo el tiempo. Pero, a pesar de todo, no conocía el ego. Creí que sería bajo de estatura como mis padres, me imaginaba que en algún momento sería guapo, pues entonces no era muy feo.

Hoy, crecido, con varios años encima y experiencias fallidas me veo contrario a esas ideas; entonces no conocía muchos secretos que hoy conozco, desconocía que mi vida había sido forjada como la de muchísima gente, pensaba que las personas por naturaleza buscaban el bien, por consiguiente era fácil aprovecharse de mi ingenuidad.

Me observo profundamente en las nostálgicas imágenes que hay en mi memoria del pasado y me convenzo de que no soy nada de lo que quería ser, ni como, ni con quién. Me entristezco por parecer una víctima más del estadístico, de esos que no cumplen sus sueños, quienes solo idealizan y terminan desempleados, endeudados, erosionados por el paso del tiempo.

Lo mejor es que todavía no termino del todo, y aunque del punto donde me encuentro es fácil caer más; hay cosas que puedo mejorar, que no es que lo esté haciendo pues mi mente es perezosa. Todos merecemos un mundo mejor para vivir, todos merecemos ser queridos por igual, pero las personas lo saben, todos lo saben, algunos hasta lo viven, el mayor trabajo de convencimiento tiene que llegar hacia uno mismo. Que no se cree nada, que parece que "todo lo hace mal".

Considero que al día de hoy, viéndome con el filtro de mis ojos de niño, soy un fracasado. A pesar de mis muchos intentos por no serlo.

Y me digo a mí mismo y a quien lo necesite: Si no piensas vivir esta vida para siempre, por lo menos ten la actitud de enfrentarla como si fuera la última vez que lo harás.

Pequeño

Por
Hoy es de esos días en los que siento la necesidad de escribir sin darme cuenta que en realidad no sé de qué hacerlo. Mientras divagaba, pen...
Ayer en la mañana me llegó un mensaje al celular (un viejo Sony W200 negro) con algo que yo sabía, pero es bueno que se sepa cual quiero compartir:

"El amor perdurable se ha vuelto imposible. Existe un zapping de tentaciones. Todo está organizado para que cambiemos de pareja. Al capitalismo le conviene que estemos solos, ya que los solteros infelices consumimos más"
— Fréderic Beigbeder.

Algo completamente cierto, contra lo cual hace algún tiempo hice planes personales, no para evitarlo, sí para sobrellevarlo de la mejor manera posible. Aunque no se note, a cada segundo que pasa me concentro en lo que será de mi vida. Soy un hombre de proyectos, con muchísimos fallidos en mi haber, pero de algún escritor aprendí una vez que si sales a la batalla y fallas mil veces tienes más posibilidades de acertar en la mil uno que si sales solo una vez y te reprimes ante la derrota; ésto es, y no como superación personal, porque los libros de superación personal realmente me abruman por su acartonado contenido, sino más bien como un consejo que si se quiere se toma y si no se rechaza, "jamás rendirse", así, como tal, como suena.

Hablando de la frase pues qué más da, entre mis proyectos pasados he visualizado la clase de futuro que quiero desde años atrás, el tipo de familia que me gustaría formar y el cómo me esforzaré por ser austero en todo sentido posible; eso no significa que pretenda ser un muerto de hambre (usando el tono despectivo de la frase) o un tacaño, sino alguien que administra e invierte sus bienes no para volverse rico (como de muchos es el sueño), sino para hacer bondades para con otros, éso no significa que andaré por ahí regalando lo que gane, no soy idiota, pero echaré andar proyectos que dejen de lado ese egoísmo que nos caracteriza (claro, si Dios me da vida y oportunidad ante todo). Falta saber lo que la mujer diga, los hijos, la vida misma. Pero han sido como muchos otros, proyectos que tengo contemplados, y que si se logran, bien y bueno, y si no, pues habré al menos hecho consciencia en mí mismo de cómo podrían ser las cosas.

Aquí mismo agrego lo que hace rato publicó un muy querido amigo, de esos como pocos que "te haces en la red" y jamás se van.

Él dijo: "Sí, perdonen, soy muy crítico y poco tolerante con eso del lenguaje, nuestro idioma es uno de los más ricos en el mundo y aún así hay pocas personas que se esfuerzan en usarlo correctamente y mantenerlo como debe ser. Lo siento mucho si a alguien le duele, pero de verdad, me duele más a mí, si supiera que no tuvieron educación básica, lo entendería, pero la mayoría de ustedes, amigos míos, son egresados de bachillerato como mínimo. En esa etapa de la educación ya nos enseñaron verbos, adjetivos, pronombres, lo que significa "sujeto y predicado", incluso, para ese nivel ya sabemos usar un diccionario y LEER."

Yo ahondé: "El problema es que dejamos el proceso de aprendizaje completamente en manos de profesores, quienes, con perdón de muchos, a veces escriben igual o peor que uno.
Más bien supongo que el deseo de escribir adecuadamente está y viene por consecuencia del deseo de uno mismo, ya que lo que nos digan, sea crítica constructiva o educación "común", nos entra por un oído y nos sale por el otro.
Así que, en mi opinión sincera, quien quiere salir del hoyo lo hace por convicción propia, no porque hay alguien atrás empujándolo. Eso creo."

Y otro de esos nerds de closet (también amigo mío) enriqueció: "Suscribo a Roca Seca; el verdadero problema es que la enseñanza prima está en manos de gandules y estafadores que se dicen ser maestros los cuales carecen de elementos probos y suficientes para poder transmitir este tipo de conocimiento; grave es pues que se le esté dando un trato básico a la mejor herramienta que tenemos para exteriorizarnos: el uso correcto del lenguaje."

La verdad es que así es; yo nací en un pozo del cual no sé si en algún momento he de salir, pero a cada día que pasa mentalizo la idea de estar "al otro lado", pero el hecho de haber nacido entre ignorancia generalizada, pobreza como denominador común y una percepción de la vida miserable como destino final no me dejó ahí; lo que no significa que mis primeros años hayan sido un asco, porque para nada, una vez se me enseñó a aprovechar cada uno de esos instantes en la vida, en los que ser yo mismo tiene buenas consecuencias, pero siempre alimenté esa hambre de ser diferente, de pensar de otro modo, de hacer las cosas previamente meditadas... Como reitero, muchas veces la regué con eso, porque la vida trata de regarla y volverla a regar, pero he aprendido tanto que a veces, me extraño de que las cosas que me parecen simples de comprender para otros sean tan complejas. Así es la vida, decisiones a más no poder, desde el nacer o no nacer, hasta el morir o no morir.

Filosófico

Por
Ayer en la mañana me llegó un mensaje al celular (un viejo Sony W200 negro) con algo que yo sabía, pero es bueno que se sepa cual quiero com...
Hoy tengo ganas de escribir algo dedicado a la pequeña Angie, mujer de grandes bondades quien siempre sabe insultarme con indulgencia y decoro. Voy a intentar que las tres historias se vuelvan una, que una sea la que exprese lo que me hacen sentir las tres... Tres es un número primo, el triángulo representa la divinidad, por eso escogí ese número, no por nada en particular.

A veces le pido salir, le ruego, le imploro, me victimizo en el camino, lo logro sin lograrlo. A comer jamás, a charlar, quizá, así fue sin ser. Es difícil saber que en un principio aunque a mi modo la quise, no lo hice, fue un trato a mi interior. Ocurre cuando en el mismo plato viertes cariño, envidia, deseo, y mucho estima. Aunque soy de los que aceptan ser humillado intelectualmente y reconozco cuando algo no puedo (a pesar de con fortaleza de espíritu demostrar lo contrario), no me gusta la derrota; menos acostumbrarme a ella; perdón si no se entiende, ésto es mío y lo hago como yo quiera.

Extraño los vídeos, las muecas, las sonrisas y las pecas. Las cándidas manos, ingenuas miradas, vibrantes mentes. Lamento desaparecer en el silencio de lo que nunca fue, porque ella jamás lo permitió; es un duelo en mi interior donde la versión sumisa de mí llora y la versión fuerte ríe. Tengo que hacerlo, no dejar de gozar la ausencia de lo que aunque guste, siempre duele.

La he sufrido tanto tiempo e incontables veces que ahora no es que me guste verle de la mano de alguien, pero mi corazón masoquista la consciente. Siempre deseándole bien, como si a su actual o anterior pareja no envidiara de por vida.

Decepciones, gente que no cumple, mujeres sin palabra. Lo pero es que en medio del desprecio que jamás habrá en mí al verla me transformo en un mandril. No puedo reclamar, no quiero hacerlo, quiero golpear, destruir, acabar.

No hay nadie perfecto ni habrá, cliché común, yo lo sé. Si espinas dan las rosas, atrás no se quedan las mujeres hermosas. Vuelve mi cabeza a cada episodio juntos,; como idiota al demostrar mis gustos. Soy un tonto por amor, víctima de las circunstancias que me han llevado a mi presente.

Yo solo y mi subconsciente hemos aprendido a ver la belleza en donde no. Me gustan los números, soy un asco en el amor; nadie me ha dejado mostrar de mí lo mejor. Lo merece y no, pues aunque en bandeja lo entregue sé cuando no soy aceptado. Las fuerzas en la escuela me dicen que no ceda, que me esfuerce hasta la muerte por lo que yo quiera de ella. Pero ella no me quiere, me desprecia a su manera, hipócritamente consciente de que me hace lamentarlo. Dejo a Dios lo que le plazca hacer con mi cabeza, paro aclaro como siempre que él conoce mis tristezas.

Extraño las charlas de antes, los momentos en los que reía. Cuando compartíamos aire. Sus fotos comentaba y ella no optaba vetarme. Aunque no sea personal, cómo duele, cómo rompe, cómo influye. Me enseñaste a valorar la presencia de la nada, a comprender que no soy yo quien no merece, sino tú la insuficiente. Y entonces, como redacta el cuento, en algún momento de la vida tendré que volver la espalda, jamás olvidaré tus maneras de insultarme, al contrario las usaré para con gusto despertarme.

No rencores, ni males, ni malos entendidos; no promesas incumplidas, ni falsas verdades; no cuentos cortos, ni tratos rotos. Estamos y estaremos en adelante en cero, completamente iguales. Reiniciamos nuestros contadores hasta el momento en el que comenzó todo. Cuando te veía con ojos y mente, ignorando mi corazón... Pues no es bueno enamorarse a quien no corresponde a mi razón.

Masoquista

Por
Hoy tengo ganas de escribir algo dedicado a la pequeña Angie, mujer de grandes bondades quien siempre sabe insultarme con indulgencia y deco...
Hoy, estoy realmente triste, definitivamente el ser juzgado de "mal amigo" nunca me va a gustar.
Tengo a un amigo, al cual aprecio mucho, en verdad en gran manera; siempre he procurado mayor estima a la mistad que al dinero, así que comenzaré diciendo lo que pasó hace unos años...

Por estos tiempos, un excompañero de trabajo me pidió prestada mi consola PSP; se la presté sin titubear, pues era una persona digna de mi amistad. Pasaron un par de semanas y un día recibí una llamada, era de él, me invitaba a comer en su casa, ¿a comer en su casa?, la verdad era algo raro que me invitara a comer en su casa y más que me llamara por teléfono para hacerlo. Yo accedí de inmediato (la comida es una de mis debilidades), no he dicho que mi amigo jamás me invitara algo de comer, lo hacía muy seguido en el lugar donde trabajábamos, pero en su casa no había ocurrido antes.
Llegué y a su casa y disfruté de un rato ameno de charla y fui alimentado, al cabo de un rato, ya acercándose la hora de mi regreso a casa me detuvo mi amigo, me dijo con voz seca que tenía que confesarme algo, le habían robado mi PSP. Me comentó que estaba dispuesto a pagarlo, pero que necesitaba que se lo cobrara en pagos parciales y en algún momento me lo terminaría de pagar. Sonreí, con sinceridad al ver su mirada un pensamiento inundó mi mente. Y le dije lo siguiente: Valoro más tu amistad que cualquier aparato, no te preocupes. No me considero un héroe ni nada por el estilo al haber hecho eso, simplemente lo sentí y así pasó. Esa noche, ambos fuimos a charlar a la feria y prácticamente no volvimos a tocar el tema. Jamás le cobré. Después de un tiempo supe de su buena capacidad para engañar y robar, aun con eso, no creo que él haya robado mi juguete...

Pero no siempre puede ser así, no siempre puedo ser tan buen amigo; la madurez involucra hacerse responsable también. En noviembre del año pasado yo presté mi casa, pues uno de mis mejores amigos la necesitaba ya que iba a dejar la que habitaba entonces (aclaro que no es el mismo amigo), así que requería un lugar como almacén para guardar todas sus pertenencias. Le presté mi casa pues hacía más de dos meses que, aunque tenía algunas cosas de valor mías, no la estaba habitando; pero seguido iba a ver cómo estaba todo, reitero, se la presté sin cobrarle un solo centavo; pues él es amigo de esos por los que soy capaz de meter las manos al fuego.

Pasó el tiempo y yo no supe de mi casa, desde que le entregué las llaves no me acerqué al lugar; tenía la idea de que él lo haría, pues incluso me comentó que pagaría el servicio eléctrico y potable para irse a habitarla durante un tiempo. Pero no fue, nunca fue; estuvo habitando con sus parientes durante ese tiempo y al cabo de algunas semanas recibió su propia casa así que necesitó ir menos a la mía.

Un día de abril (o algo así, no lo sé con exactitud y no quiero preguntarle a mis padres en éste momento); ese día me timbraron al celular; era la hermana de mi amigo quien me dijo: "Carlos, oye, robaron tu casa." Estaba ahí buscando un vestido y se dio cuenta que la casa estaba abierta, y faltaban muchas cosas; yo en sí, cosas costosas no tenía, quizá solo lo que el inmueble incluía así como una estufa. Pues esa estufa ya no estaba, se la habían robado, junto a un montón de cosas valiosas que le robaron a él; hace un tiempo para acá que aprendí a no enojarme por banalidades, y desde entonces, no se me ve enojado.Hago berrinches y reclamaciones como un niñato a veces, pero enojarme nunca. Mi respuestas fue simple: "Está bien, coméntale a tu hermano". Al rato me llegó la llamada de mi amigo, diciéndome lo mismo, "Échale ganas y pues, espero que se solucione todo. A mí nada más me robaron, de valor, la estufa, pero la factura estaba ahí mismo, así que no sé." Él quería demandar, yo le dije que siguiera con el plan. No demandó, no pudo porque no tenía o no sabía dónde tenía las facturas.

Un tiempo después mi amigo decidió sacar sus cosas y me avisó que se habían vuelto a meter a robarle; ahora sí le habían despojado de cualquier cosa de valor , así que yo fui a sacar lo que quedara mío, libros, útiles y otras cosas. La puerta principal estaba rota y abierta, mi amigo la había cerrado con unos alambres, según me dijo. La puerta de atrás estaba abierta, faltaban cristales.

Hoy mis padres volvieron a ir, yo no he querido volver a ese lugar, me hace sentir mal. Me contaron que no hay protecciones, toda la herrería la arrancaron, incluidas puertas y ventanas, no había cristales, se robaron el lavabo, se robaron la bomba, se robaron el boiler, las puertas de madera y el tinaco no están seguros. Nada más falta que lleguen con cincel y marro para tumbar las paredes y el vitropiso. El baño no lo tocaron, mi mamá, con la voz entrecortada y las lágrimas asomándose dijo: "Seguramente lo usan para cagar". Estaba muy molesta, estaba muy molesto mi padre, lo están, todos.

He decidido, después de haber sido víctima indirecta de al menos tres robos a mi propiedad, que voy a dictaminar un límite para que mi buen amigo actúe, pues de seguir así, los ladrones son capaces de robarme hasta los cimientos... Y eso no me conviene.
Es ahí donde mis convicciones de amigo se ven sobre un hilo, pues en verdad lo digo, me duele en el alma el hecho de saber que mi muy querido amigo tiene muchas deudas (casi como yo), me da tristeza y demasiada compasión... Pero siento rabia, una rabia indomable por saber que no ha hecho absolutamente nada de mi casa, ni siquiera se ha dignado a visitarla, la dejó abandonada cual basca y... mientras pensaba eso, para evitar enojarme, decidí venir aquí a confesarlo; pues me hiere, me siento pésimo por aparentar éste amor a lo material, pero me lastima también ver a mis padres así, a mi hermana rogando por que se trajeran los dos o tres cristales que quedaron ahí... En serio. Estoy muy triste.


Amigo

Por
Hoy, estoy realmente triste, definitivamente el ser juzgado de "mal amigo" nunca me va a gustar. Tengo a un amigo, al cual apreci...