Una vez más he vuelto. No me diste derecho a réplica, te rogué una vez, dos veces, tres, que te quedaras... Fue en vano. Siempre es en vano cualquier movimiento contigo. Siempre es en vano creer que puedo lograr algo, siempre es en vano intentar evitar tus insultos.

Hoy me maldijiste. De una manera muy fuerte tengo que mencionar. Me has hecho una vez más comprender mi asquerosa realidad.

Es cierto, tengo los defectos de un enfermo mental, no negaré que puedo parecer uno. Pero jamás te he hecho daño, jamás te he insultado, jamás te he visto por debajo de mí, jamás te he pisoteado o humillado como tú has hecho conmigo.

Tú me has herido, me has insinuado cosas que tú misma desconoces de mi persona, me has acribillado con tus palabras punzantes. Yo he guardado silencio, una vez más he guardado silencio.

Estando en el suelo me has aplastado el rostro y yo he rogado piedad, misericordia, un rastro de benevolencia de tu parte. No lo he encontrado.

Es cierto, soy un miserable. Y quizá como me dijiste, lo sea toda la vida. Pero jamás, jamás me escucharás hablar mal de ti, jamás te enterarás de que yo haya hecho algo en tu contra; porque no lo haré, me quedaré tendido como muerto a esperar que una idea cruce mi cerebro y expresarte —como ahora hago— lo que mi corazón dice.

Zaira, jamás te haré daño. Tu eres y serás mucho más especial de lo que te consideres. Me dueles, te juro que un nudo horrendo cruza mi garganta en estos momentos y cada vez que me dejas en restos.

No quiero matarme, no lo haré. Valgo más que un pedazo de porquería, lo sé.

He cometido un sinfín de errores, a este tiempo deberías estar acostumbrada a leer mis tonterías. Te aprecio, sinceramente lo hago, por más que te esfuerces en alejarme y despedazarme siempre te conservaré en mi memoria.

En mi mente hay una Zaira, una misma Zaira que jamás dejará de interesarme, te estimo aunque creas que soy escoria.

// Se lo escribí a Zaira el 15 de Agosto de 2010.



Zaira

Por
Una vez más he vuelto. No me diste derecho a réplica, te rogué una vez, dos veces, tres, que te quedaras... Fue en vano. Siempre es en vano ...
Hace tiempo conocí a una chica,
nos desvelamos todas las noches,
le decía cuanto la quería,
ella siempre sonreía.

Su nombre para mí era Zhol,
aunque todo fue una estafa,
según eso ella temía,
del que del otro lado estaba.

Le he demostrado que soy bueno,
que la respeto en verdad,
que sé cuando debo ser sincero
y que no me agrada la falsedad.

Le dije que llamarse Sol no me desagrada,
pero sí me hacía pensar,
que ella en mí no confiaba.

Yo la quiero, es una mujer adorable,
es simpática y estimable.

Zhol, vida, cielo, deja ya tu orgullo de lado,
mi amor, preciosa reina,
imagina que no lo ha dicho cualquier fulano.

// Se lo escribí con mucho cariño a mi amiga Sol el 24 de Junio de 2011.


Zhol

Por
Hace tiempo conocí a una chica, nos desvelamos todas las noches, le decía cuanto la quería, ella siempre sonreía. Su nombre para mí era...
Cuando le preguntas a un joven "qué le enseñaron en la escuela", por lo general habrá una respuesta en común: Leer y escribir, así, en conjunto, siempre.

Pero veamos la realidad, ¿en verdad sabemos leer? No sé cuántos libros lean ustedes, si estudian, supongo, leen muchos más (aquí cabe cualquier licenciatura), pero leer por placer no todos lo hacemos. Un ejemplo claro que me gusta mencionar es la saga de Harry Potter, muchos son los chavos que se han “quemado” toda la serie en cine o televisión, pero no asciende a tantos la cantidad de los que han leído tan estupendas obras. Vamos, yo mismo he recomendado los libros a aquellos que se dicen fanáticos de la serie, y sus respuestas por lo general son semejantes: “¿Para qué? Si puedo ver la película.”

Eso es sólo un  mínimo efecto que los medios de comunicación han causado en nuestras vidas. Hablando de televisión: Telenovelas, programas de concursos, programas de relleno, series, etcétera. La basura televisiva es lo que la gente prefiere ver a leer un maravilloso libro, sé que ésta es una guerra que los lectores jamás podremos ganar, pero intentamos concientizar a las personas a volverse un poco más lógicas, críticas e intelectuales.

Leer libros (de cualquier género) genera hábito y amor por la lectura. Hay una frase de Sir Francis Bacon que dice “el conocimiento es poder”. Vivimos anonadados y embaucados a lo que la “sociedad” nos pueda ofrecer y para eso nos preparamos. Cada que salgo a la calle y veo las famosas tribus urbanas me pregunto, ¿realmente conocen los fundamentos de las culturas que siguen? Es decir, veo un tipo completo vestido de negro y los labios igualmente coloreados, conocido como darketo o gótico, ¿será realmente que él conoce los principios fundamentales del arte, la literatura y el tiempo que presume llevar como bandera? Avanzo más en mi andar y me encuentro a uno llamado rastafari, me pregunto ¿habrá leído el Kebra Nagast, libro de la gloria de los reyes y ahora sigue los preceptos que ahí se inculcan? ¿Habrá comprendido el prefacio?

Mencionar esas dos tribus es un ejemplo solamente, no me interesa para nada hacer que quienes practiquen estas u otras doctrinas se ofendan por su propia ignorancia.

No me interesa meterme a hablar de religión, ni de ideologías, cada cabeza es un mundo, pero seamos honestos con nosotros mismos y autoanalicémonos. Realmente, no leemos y si leemos, no comprendemos; en cualquier caso, estamos jodidos.

Respecto a la escritura, comenzaré con esto: He leído tres documentos de tesis, redactados por profesionistas que han terminado una carrera, quienes con méritos y deméritos la han culminado. ¿Saben qué he encontrado? Faltas de escritura, faltas gramaticales, secciones copiado-pegadas, fotos con pie en páginas completas y desorden. Esas tesis han sido de ingenierías, por lo que los licenciados quedan libres de lo anterior, supongo que por su mucho leer sabrán por lo menos llevar el orden de sus ideas.

Pero hay algo que nos pega a muchos, la redacción casual, hablo de aquella que hacemos sin el compromiso de “escribir bien”, cartas, tareas, recados, mensajes, correos, etcétera. En ellas nos olvidamos de algo básico en nuestro idioma, los benditos acentos.

Nos conformamos con que el texto vaya más o menos legible y más o menos entendible, damos cualidades de criptógrafo a nuestro público receptor. Es consecuencia de eso que los correctores electrónicos sean tan famosos.

Hablando de música, escuché una fracción de una canción que dice:
"Se siente.
Se siente.
Caliente.
L disco en high.
Mujeres vengan, tomen un bye bye.
Yo la llamo y le caigo.
Ella tiene mi sal.
Esta buscando que de en el Ferrari un ride.
Alineadau con andar en traje, corbata.
Los lideres de nuevo descontrola a las gatas.
El negocio se trata de ganar más plata.
Sedúceme negra yo ya prendí la fogata.
Se ven las luces de neon y el humo (casi no te veo).
Chula yo quiero un cantito si tu me dejas te fumo.
Te consumo.
Déjame mudo.
Lamento decirte que usted conmigo no pudo."
(Abusadora, Wisin and Yandel).

El mismísimo Edgar Allan Poe se estaría revolcando en su tumba de escuchar algo como esto. Insultos literarios acompañados de una banda sonora que incluye un constante retumbar de "bajos" y ruidos sin armonía comprendida.

Con letras dirigidas a terminologías sexuales y ofensivas. Considerarlo parte de la cultura sería ofender a aquellos personajes que se esforzaron por dar el mote de arte a la música, y a muchos grandes poetas y juglares que se interesaron en crear letras que mostraran inspiración y buen gusto.

Según parece, estamos cayendo en un agujero de ignorancia del que difícil será salir. Y todo esto es gracias a los maravillosos medios a los que estamos conectados: Incluido el internet, con Facebook, Messenger y Twitter como principales responsables. La televisión, con sus programas realmente desarrollados para personas con cociente intelectual medio bajo. Las revistas, con demasiado contenido publicitario y poco material para nutrir el cerebro (espero que ésta no sea una de las mencionadas). Los diarios, siempre fieles a ser manipulados acorde con lo que unos cuantos desean y no que se muestre. Los gobiernos, que invierten en una educación de poca calidad y completamente inútil. La sociedad misma, que sigue siendo aborregada sin abrir los ojos a las grandes cosas que se encuentran ocultas a su alrededor.

En fin, si un día abro una empresa y tengo la oportunidad de solicitar empleados en los anuncios económicos pondré: Empresa solicita personal que sepa leer y escribir, se prometen magníficos sueldos y excelentes prestaciones. Lo demás está de más.

// Escribí esto como participación en una revista local el 30 de Diciembre de 2010.


Ni

Por
Cuando le preguntas a un joven "qué le enseñaron en la escuela", por lo general habrá una respuesta en común: Leer y escribir, así...
Hola corazón,
¿en qué estado te encuentras?
Sabes tú muy bien,
que la quiero entre mis manos.
La deseo poseer.

Dime corazón,
¿porqué hacer tanta rabieta?
Tu no entiendes mi sistema,
yo trabajo diferente,
sería feliz besando,
todo el tiempo a mi Galleta.

Oye corazón,
¿quién es esa Galleta?
Esa una niña preciosa,
que me ha demostrado su amor,
una niña vigoroza,
de quien deseo yo el calor.

Hey corazón.
¿crees estar enamorado?
Te juro por mi propia existencia,
que algo semejante he experimentado.
Sin embargo estoy al margen,
te conozco a ti muy bien,
será mejor que mantegas,
retirada de ella tu piel.

Sabes corazón,
¿no será que tu estás loco?
Sincéramente y lo admito,
no es ningún requisito,
pero cuando estamos juntos,
se siente bastante bonito.
Si es que padezco locura,
ella me llenará de caricias,
es muy grande su ternura,
una niña, mil delicias.

Habla corazón,
¿la volverás a ver?
Debo admitir que la extraño,
y no sólo por llamarse Fer.
Ella me demuestra siempre,
que es buena para querer.

Finalmente corazón,
¿porqué tu has escrito esto?
Porque ignoro la forma perfecta
de mostrarle sinceramente,
sin caer en mis flaquezas,
al tener su cuerpo en frente.
Digo esto muy convincente:
mi debilidad es latente
y me calienta demasiado
estar con ella juntamente.

Ganamos cuanto deseamos,
aprendemos estando juntos,
locos pueden mencionarnos,
los muchos desconocidos,
es bueno que nos tengan miedo,
nos vean de tontos y sin sentido.
Hasta siempre seremos algo:
amigos y más que amigos.

// Se lo escribí con mucho cariño a mi amiga Fer el 29 de Septiembre de 2010.


Galleta

Por
Hola corazón, ¿en qué estado te encuentras? Sabes tú muy bien, que la quiero entre mis manos. La deseo poseer. Dime corazón, ¿porqué ...
Y no, no estoy planeando explicar el proceso que uno invierte al defecar. Probablemente eso sería menos insultante. Es evidente que el mundo está cambiando. Las cosas de antes no son como ahora, nos hemos enfrascado en un modo de vida estresante, somos gestores de un enorme hábito, del cual nunca dejaremos de ser víctimas. ¿Por qué victimas? La basura mediática que consumimos día con día nos convierte en números, lo que significa que, cuantos más apuesten por algo, más promovido será y esto a la vez será aceptado por la mayoría, generando bondadosos beneficios económicos a los productores.

¿Cuántas veces hemos repetido que somos manipulados por los medios? ¿Lo comprendemos?
A menudo, uno se obsesiona con la idea de ser diferente, de ser especial, de ser único; pero no lo somos, ciertamente no existimos como tal. No existe una realidad alternativa, una dimensión que nos coloque en el centro del Universo, un espacio exclusivamente nuestro. Números, es lo que somos cada uno tan valioso e insignificante como el otro.

Nuestro país se encuentra regido por la estadística, donde las acciones futuras se miden en probabilidades; somos uno más entre un montón los que seguimos tal o cual moda, los que adoptamos tal o cual costumbre.

Los recursos mediáticos son inalcanzables, el poder de la prensa es devastador y la manipulación global es asunto de todos los días.

Yo, quisiera presumir de no ser un robot más, quisiera mencionar lo muy orgulloso que me siento de no ser seguidor de modas, de marcas, de firmas; pero lamentablemente para mí, no es así. Podría ser presuntuoso y declararlo en conciencia de que ustedes no me conocen, pero mis pantalones Levi’s, mi camiseta Lacoste y mis tenis Vans vendrían corriendo a reprimirme.

La pregunta no es quién, sino qué eres para la sociedad común, cuán grande es el valor que tu persona asume en el estrato que te desarrollas, qué tan lindo, culto, atlético o adinerado eres.

Entonces, llego a un punto en el que todo lo que he dicho me deja en evidencia, me señala y me reduce a nada. Quiero cambiar, por eso mismo mi interés se encuentra en pertenecer a una generación de personas pensantes, que afronten los sucesos de la vida de manera crítica, realista, sincera.

La llamada generación de mierda no es la que no se equivoca; es la que al hacerlo se vuelve, hace cuentas y asume su responsabilidad.

¿Por qué generación de mierda? Simple, vivirán entre ella, harán mucho de lo que ella hace, pero mantendrán la libertad en espíritu. Serán testigos del cambio evolutivo que sufrirán los otros, intervendrán sólo en los más allegados a ellos, aceptarán las cosas como son, la lucha no consiste en demostrar lo rebelde que puedan llegar a ser.

El objetivo es evitar ser flanqueados, entonces, con el paso del tiempo, quienes hayan podido librar las falsas expectativas que el exterior promueve, habrán vencido. Porque estarán ocupando cargos importantes y de difusión intelectual. Entonces actuarán. Porque la única manera de desmantelar una edificación tan resistente es desde adentro.

¿Será sencillo? En absoluto; se trata de luchar contra la carnalidad y superficialidad del propio yo, sin lograr vencerse. Invito a todos a unirse al reto. Tu punto de trabajo desde ahora es el siguiente: Preparación, aprendizaje, desarrollo y triunfo; y claro, nunca está de más motivar a las nuevas generaciones a pertenecer al equipo.

La generación de mierda movilizará a los miembros del sistema contra ellos mismos, es fría y calculadora, jamás se intimida, no inicia una batalla hasta tener bien claras las debilidades del oponente. Es objetiva, pero prudente. Exponencial, pero sutil.  Mestiza, pero incorruptible.

Hoy no tengo nada más que exponer, pero en verdad me interesa que quien lea esto lo haga con el cerebro activo; no son sólo un montón de líneas redactadas por que sí, tienen un propósito definido que es el “inculcar un deseo”. El deseo de ser libres tanto nosotros como las generaciones venideras, ser quienes somos, definir nuestros gustos por nosotros mismos, tener autoridad en nuestras decisiones, ser cínicos. Invito a quien sea que no pueda comprender la redacción me mande un mensaje, con gusto le responderé explicando el por qué de las cosas. Es un placer como siempre tener la libertad de expresar ideas.

Atentamente RokCK.
PD: Hay una canción de Los Prisioneros que se llama así y dice:

“Lloras la pobreza
Y a jugar al perseguido por la sociedad
Oh, no, otro artista más
Se me acerca y me quiere felicitar
Dices que me quieres
Y no entiendes lo que digo ¡Hey!
Y vas y te disfrazas
Y a veces necesito creer en ti.
Generación de mierda.”

// Escribí esto como participación en una revista local el 7 de Junio de 2011.


Mierda

Por
Y no, no estoy planeando explicar el proceso que uno invierte al defecar. Probablemente eso sería menos insultante. Es evidente que el mundo...
Me gusta ser una persona en constante crecimiento, que nada me detenga ante la oportunidad de ser más y mejor. Quiero aprender, quiero crecer, quiero obtener, quiero brindar, quiero lograr, quiero encontrar, quiero servir.

Hay muchas historias para contar al mundo respecto a quién soy, de dónde vengo y hacia dónde voy; pero no quiero solamente contar historias, quiero experimentarlas; que sin importar el tiempo que tarde, mis pasos sean firmes y me lleven a ser cada vez más grande.


Ambición

Por
Me gusta ser una persona en constante crecimiento, que nada me detenga ante la oportunidad de ser más y mejor. Quiero aprender, quiero crece...
Es el número de páginas que he escrito en mi libreta antes de retirarme de este lugar...
Par algunos, el once es un número que no significa nada, para mí en cambio, es uno más en la lista de mis ocho números favoritos: Uno, tres, siete, ocho, once, trece, veintiocho y setenta y siete. Siendo mi preferido sobre todos el número ocho.

El ocho es una apreciación vertical del infinito, aquello que no tiene principio y tampoco final, que puede ser tanto como uno sea capaz de potenciar la naturaleza del propio pensamiento. Es aquello que se puede ejemplificar pero no contener; podría decirse que es un número representativo de lo que es Dios; pues el infinito lo es todo, pero el infinito también es uno, y para uno es todo.

Y así es, como a partir de la nada una idea alimentada de un circunloquio puede darme algo curioso para escribir; eso es para mí una idea: La apertura de una fuente inagotable de particularidades, la expansión de un agujero negro en el espacio del existencialismo, la explosión nuclear de toda la materia  informativa que existe en el Universo.


Once

Por
Es el número de páginas que he escrito en mi libreta antes de retirarme de este lugar... Par algunos, el once es un número que no significa...