¿Qué haces una noche de inspiración en la que la luna espera por tus versos mientras tú mueres por sus besos?
Crecí en un mundo repleto de esperanzas, entre las constantes creencias de que quién se esfuerza, lo consigue. Y así hasta que llegué al tiempo presente, en el que no me queda más que superar mis miedos a cambio de sentir sus manos. Suspiros entrecortados.
¿Qué hace un loco compartiendo extractos de su corazón a cambio de nada, ofreciéndolos por el simple hecho de poder hacerlo, como si en el infinito universo de posibilidades algún día logre que llegue a la persona indicada?
Cuando comencé a escribir, pensé que podría hacerlo con inteligencia, esconder entre versos historias utópicas de realidades alternas; conforme las letras aparecían una después de la otra comprendí que ni siquiera soy bueno, a duras penas defiendo una idea en texto de vez en cuando, opté por aceptar lo que era necesario, que los textos eran muestras de una mente deseosa de ser leída, siempre amando.
¿Te gustan los libros, la poesía, el arte, conocer lugares, aprender, la historia, la filosofía, la ciencia, la tecnología? De ser así, ¿por qué a veces siento que me abandonas en el lecho de un recuerdo a punto de extinguirse? Si te alejas de mí, cómo es que funciona el entrelazado en mi interior, ¿por qué no confiesas que eres parte fundamental de mis silencios? ¿Qué estoy diciendo? Difícil es entender al redactor que se hunde en un circunloquio de atrocidades intelectuales. No tengas miedo a ser abierto; total, sin ti estoy más que muerto.
Crecí en un mundo repleto de esperanzas, entre las constantes creencias de que quién se esfuerza, lo consigue. Y así hasta que llegué al tiempo presente, en el que no me queda más que superar mis miedos a cambio de sentir sus manos. Suspiros entrecortados.
¿Qué hace un loco compartiendo extractos de su corazón a cambio de nada, ofreciéndolos por el simple hecho de poder hacerlo, como si en el infinito universo de posibilidades algún día logre que llegue a la persona indicada?
Cuando comencé a escribir, pensé que podría hacerlo con inteligencia, esconder entre versos historias utópicas de realidades alternas; conforme las letras aparecían una después de la otra comprendí que ni siquiera soy bueno, a duras penas defiendo una idea en texto de vez en cuando, opté por aceptar lo que era necesario, que los textos eran muestras de una mente deseosa de ser leída, siempre amando.
¿Te gustan los libros, la poesía, el arte, conocer lugares, aprender, la historia, la filosofía, la ciencia, la tecnología? De ser así, ¿por qué a veces siento que me abandonas en el lecho de un recuerdo a punto de extinguirse? Si te alejas de mí, cómo es que funciona el entrelazado en mi interior, ¿por qué no confiesas que eres parte fundamental de mis silencios? ¿Qué estoy diciendo? Difícil es entender al redactor que se hunde en un circunloquio de atrocidades intelectuales. No tengas miedo a ser abierto; total, sin ti estoy más que muerto.
¿Qué haces una noche de inspiración en la que la luna espera por tus versos mientras tú mueres por sus besos? Crecí en un mundo repleto de...