Hoy, después de todo, no ha cambiado nada, sigue siendo el mismo muchacho mediocre que unos años atrás,incluso, me atrevo a mencionar que un tanto más mediocre; antes, por lo menos dedicaba pequeñísimos ratos libres a escribir acerca de las bondades del vivir, ahora se siente molesto con él mismo por estar en donde está, por no ser nada, ni hacer el mínimo esfuerzo por cambiar.
Rechaza todo tipo de ayuda y cualquier muestra de afecto la deposita en un costal repleto de decepción y mentiras.
Cae en cuenta que no sirve, no vale, no merece absolutamente por lo que según él, ha intentado.
No sabe hablar, no sabe leer, ya ni siquiera escribir, pensar lógicamente se encuentra entre sus desvaríos.
Cree que un mundo allá de gente poderosa y obstinada trata de desaparecerle. No confía ni en su sombra… pero no teme.
Los sentimientos se transforman en evidencias… sólo eso.
No hace falta torturarle para comprender el gran hueco que es su interior, ya no se dedica a luchar. Se desplaza mediante hilos, quiere dejar de hacerlo, pero no puede.
Reacciona de la misma manera ante el miedo, el odio, la tristeza y la aflicción… Desconoce las verdades absolutas, carece de criterio.
Vida, ya no quiere más oportunidades, está harto del todo y la nada. Contempla con amargura y desconsuelo los viejos tiempos en los que solía ser algo… cualquier cosa. Una cosa.
Vida, asegurate de que no llore… Las lágrimas que ha derramado son banales, incluso más de lo que se pudiera esperar. Cuando valga la pena… Por mucha que sea la pena, déjale ir; por favor.
Déjale ser un lobo solitario que busca con qué y de qué vivir. No le quites lo único que tiene.
Déjale pedir aunque nunca le sea dado. Que sus ojos no se nublen nunca, que sus piernas no se cancen, que sus manos no se desgasten, que encuentre la salida…
Si bien, no soy el indicado para hablar de él, soy el único que le conoce al cien.
Las palabras deberían hacer más por él, aunque no creo que así sea; porque pedir por él y por mí es lo mismo…
Rechaza todo tipo de ayuda y cualquier muestra de afecto la deposita en un costal repleto de decepción y mentiras.
Cae en cuenta que no sirve, no vale, no merece absolutamente por lo que según él, ha intentado.
No sabe hablar, no sabe leer, ya ni siquiera escribir, pensar lógicamente se encuentra entre sus desvaríos.
Cree que un mundo allá de gente poderosa y obstinada trata de desaparecerle. No confía ni en su sombra… pero no teme.
Los sentimientos se transforman en evidencias… sólo eso.
No hace falta torturarle para comprender el gran hueco que es su interior, ya no se dedica a luchar. Se desplaza mediante hilos, quiere dejar de hacerlo, pero no puede.
Reacciona de la misma manera ante el miedo, el odio, la tristeza y la aflicción… Desconoce las verdades absolutas, carece de criterio.
Vida, ya no quiere más oportunidades, está harto del todo y la nada. Contempla con amargura y desconsuelo los viejos tiempos en los que solía ser algo… cualquier cosa. Una cosa.
Vida, asegurate de que no llore… Las lágrimas que ha derramado son banales, incluso más de lo que se pudiera esperar. Cuando valga la pena… Por mucha que sea la pena, déjale ir; por favor.
Déjale ser un lobo solitario que busca con qué y de qué vivir. No le quites lo único que tiene.
Déjale pedir aunque nunca le sea dado. Que sus ojos no se nublen nunca, que sus piernas no se cancen, que sus manos no se desgasten, que encuentre la salida…
Si bien, no soy el indicado para hablar de él, soy el único que le conoce al cien.
Las palabras deberían hacer más por él, aunque no creo que así sea; porque pedir por él y por mí es lo mismo…
Pido
Por
RokCK (RokCK)
Hoy, después de todo, no ha cambiado nada, sigue siendo el mismo muchacho mediocre que unos años atrás,incluso, me atrevo a mencionar que un...