"Por alguna extraña razón" es mi muletilla, una de ellas. El "por ejemplo" he notado que aunque me esfuerce en no decirlo siempre se encuentra ahí, pero eso no termina siendo lo que más me asusta; lo que más me asusta es el hecho de hasta ahora no poder erradicar pa', onde, verdá, nomás, y otras aberraciones de la lengua de mi vocabulario.
Aunque hay un par, un par que seriamente están arraigadas en mí, unas que más que asustarme me hace reír el utilizarlas tan comúnmente, y es que, aunque lo intente a veces y me proponga ser mejor persona en la forma de hablar siempre habrá ahí un "chale" y un "chido" que haga complicada mi existencia.
Chido más chale, qué difícil me es hasta hoy evitar decir esas dos palabritas, una proveniente, según me platicaron de los vendedores de materias provenientes de China (fayuqueros) y la otra no tengo ni la menor idea. Quisiera poder convencer a las personas que mis conocidos "chilangos" no los que, gracias a las platicas constantes que tengo con ellos, ha propiciado que yo haga mías ese par de palabras.
Al principio sentía que ofendía cuando las utilizaba, quizá haya quién todavía lo piense entre mis conocidos, sin embargo, hace muy poco tiempo mientras pedía perdón a una persona por mencionarlas en nuestra charla ella me confesó que, bueno, eso me daba originalidad. Me ganó la risa, no es que considere que quien habla como naco de barriada sea de lo más original (que no tengo nada contra ellos, inclusive algunos me impresionan), sin embargo, es bueno saber que no todos se sienten ofendidos por mi no tan propia manera de hablar.
Ya entrados en esa platica, quiero que sepan que admiré mucho la expresión de esa dama, quien con toda formalidad me hacía quedar en ridículo durante la conversación, pasamos un rato agradable (el mío fue incluso increíble, soy geek, que una mujer y yo hablemos es épico, compréndanme). Ella dice tener voz de niña; no, no tengo complejo de pedófilo ni nada por el estilo, para mí era solamente una voz dulce y suave de esas que vale la pena guardar silencia para escucharlas con afluencia.
Regresando a la muletilla que titula esta entrada, antes la usaba muchísimo, sé que es una que sobretodo, de las cosas que escribo la he reducido poco a poco. El esfuerzo es una constante en el deber de quien planea mejorar, y a cada instante debe verse a sí mismo como un ser que comete errores. Pero aceptarse no es lo mismo que resignarse, es necesario actuar en pro del propio crecimiento, mira que si uno mismo no lo hace no habrá nadie más que lo haga por nosotros.
Entonces, sé que escribo contradicciones en muchas instancias, una vez publico que no seamos como los demás y a la siguiente súbitamente digo que seamos mejores y que ser mejores se define en "hablar correctamente", no es así, yo claro dejé desde un inicio que de aquí quien quiera puede tomar lo que le sirva, lo que no, simplemente ignorarlo. No hace a una mejor persona querer ser exactamente como alguien más, pero en mi percepción, una mejor persona se hace a partir de tomar lo bueno de los demás y hacerlo suyo.
Aunque hay un par, un par que seriamente están arraigadas en mí, unas que más que asustarme me hace reír el utilizarlas tan comúnmente, y es que, aunque lo intente a veces y me proponga ser mejor persona en la forma de hablar siempre habrá ahí un "chale" y un "chido" que haga complicada mi existencia.
Chido más chale, qué difícil me es hasta hoy evitar decir esas dos palabritas, una proveniente, según me platicaron de los vendedores de materias provenientes de China (fayuqueros) y la otra no tengo ni la menor idea. Quisiera poder convencer a las personas que mis conocidos "chilangos" no los que, gracias a las platicas constantes que tengo con ellos, ha propiciado que yo haga mías ese par de palabras.
Al principio sentía que ofendía cuando las utilizaba, quizá haya quién todavía lo piense entre mis conocidos, sin embargo, hace muy poco tiempo mientras pedía perdón a una persona por mencionarlas en nuestra charla ella me confesó que, bueno, eso me daba originalidad. Me ganó la risa, no es que considere que quien habla como naco de barriada sea de lo más original (que no tengo nada contra ellos, inclusive algunos me impresionan), sin embargo, es bueno saber que no todos se sienten ofendidos por mi no tan propia manera de hablar.
Ya entrados en esa platica, quiero que sepan que admiré mucho la expresión de esa dama, quien con toda formalidad me hacía quedar en ridículo durante la conversación, pasamos un rato agradable (el mío fue incluso increíble, soy geek, que una mujer y yo hablemos es épico, compréndanme). Ella dice tener voz de niña; no, no tengo complejo de pedófilo ni nada por el estilo, para mí era solamente una voz dulce y suave de esas que vale la pena guardar silencia para escucharlas con afluencia.
Regresando a la muletilla que titula esta entrada, antes la usaba muchísimo, sé que es una que sobretodo, de las cosas que escribo la he reducido poco a poco. El esfuerzo es una constante en el deber de quien planea mejorar, y a cada instante debe verse a sí mismo como un ser que comete errores. Pero aceptarse no es lo mismo que resignarse, es necesario actuar en pro del propio crecimiento, mira que si uno mismo no lo hace no habrá nadie más que lo haga por nosotros.
Entonces, sé que escribo contradicciones en muchas instancias, una vez publico que no seamos como los demás y a la siguiente súbitamente digo que seamos mejores y que ser mejores se define en "hablar correctamente", no es así, yo claro dejé desde un inicio que de aquí quien quiera puede tomar lo que le sirva, lo que no, simplemente ignorarlo. No hace a una mejor persona querer ser exactamente como alguien más, pero en mi percepción, una mejor persona se hace a partir de tomar lo bueno de los demás y hacerlo suyo.
"Por alguna extraña razón" es mi muletilla, una de ellas. El "por ejemplo" he notado que aunque me esfuerce en no decirl...