Perfección

Pretendo hacer de ti lo que tú quieras, siempre y cuando mis dedos de ti no se alejen nunca.
Es bien sabido lo precioso que es poder tocar tu piel e iluminar con la desnudez de la misma el tiempo; como morir en silencio, como desear la gloria. Es asombroso lo fácil que para ti es producir memoria...

"Mande" es una invitación. Es lo más rico que puedo escuchar decir a alguien, pues libera partes de mi instinto que remotamente reconozco. Mi deleite a partir de ese momento es verte llena de placer, de dicha, cada centímetro de ti satisfacer...

Única, es la forma en la que se define lo que considero yo de ti; mi estrago en el oscuro sendero del andar en solitario me ha enseñado solamente una cosa del hecho de no poder tenerte a diario, y es que siempre, al final del túnel, cuando parece no haber nada, cuando parece haber terminado, está alguien esperando con un mayor tesoro en manos, gran dicha, poder humano...

El precio de encontrar el verdadero amor se esconde en el aprender a conjugarse uno solo, ignorar el pesimismo; la completa fría y sombría realidad del que entre el temor se oculta, el que entre espesas y pantanosas aguas nada, es en verdad una intención sincera de deseo de cambio, de desesperada búsqueda por al final encontrarlo todo, y saber que es nada, que es uno mismo.

Entonces descubrir que la perfección existe, que lo que ahí se encuentra, dentro de la pulcra individualidad es lo que nos hace inmensos, lo que nos da valor, lo que nos brinda vida, lo que nos hace comprender que todo cuanto siempre quisimos siempre lo hemos tenido, pues somos nosotros mismos.