Difusión
Después de agregar todas las características para que esta nota mental pueda ser publicada de la manera a mi entender más correcta posible, es hora de iniciar con lo que vendrá siendo la difusión de un espíritu en busca de ideas que fomenten el mejorar como seres humanos.
Lo que menciono en el párrafo anterior no es un simple destello de elocuencia procedente de una pútrida y maléfica intención moral, lo que pido en realidad es que nos unamos como seres pensantes en pos de lo que nos volverá miembros de una creciente y pudiente sociedad enriquecida con el intelecto y la sabiduría como ingredientes secretos.
No estoy y nunca estaré en contra de aquellos que tras cortinas de súplicas, manifestaciones y paros procuran influenciar en la actitud y merecer aquello por lo que luchan básicamente teniendo la razón desde el principio. Sin embargo sé, por la clase de carroñeros que se encuentran en la cima del poder, que será prácticamente una rotunda pérdida de tiempo lo que inviertan en esa actitud, puesto que esas singularidades están completamente sucias por las acciones con las que se han movido hasta su posición actual. Entonces, ¿cómo es posible que alguien con un erróneo concepto de crecimiento y honestidad realice un acto evolutivo tan trascendente de la noche a la mañana? La respuesta: Eso no sucede.
A lo que voy es, probablemente las instancias usadas hasta este momento han sido poco convincentes para los objetivos particulares aunque en los generales han causado revuelo porque los miembros de esas minorías específicas están completamente exentos de la dirección de dichos acontecimientos, en otras palabras, a menos que lo sientan en carne propia podrán dejar de mostrarse ajenos a la realidad.
Dicho lo anterior simplemente quiero terminar esta pequeña aportación diciendo que me gustaría mucho que esto que inicio hoy exista durante un largo periodo de tiempo, y que, de terminar ante ojos de asiduos lectores procuraré, con mayor responsabilidad, expresando continuamente.
Lo que menciono en el párrafo anterior no es un simple destello de elocuencia procedente de una pútrida y maléfica intención moral, lo que pido en realidad es que nos unamos como seres pensantes en pos de lo que nos volverá miembros de una creciente y pudiente sociedad enriquecida con el intelecto y la sabiduría como ingredientes secretos.
No estoy y nunca estaré en contra de aquellos que tras cortinas de súplicas, manifestaciones y paros procuran influenciar en la actitud y merecer aquello por lo que luchan básicamente teniendo la razón desde el principio. Sin embargo sé, por la clase de carroñeros que se encuentran en la cima del poder, que será prácticamente una rotunda pérdida de tiempo lo que inviertan en esa actitud, puesto que esas singularidades están completamente sucias por las acciones con las que se han movido hasta su posición actual. Entonces, ¿cómo es posible que alguien con un erróneo concepto de crecimiento y honestidad realice un acto evolutivo tan trascendente de la noche a la mañana? La respuesta: Eso no sucede.
A lo que voy es, probablemente las instancias usadas hasta este momento han sido poco convincentes para los objetivos particulares aunque en los generales han causado revuelo porque los miembros de esas minorías específicas están completamente exentos de la dirección de dichos acontecimientos, en otras palabras, a menos que lo sientan en carne propia podrán dejar de mostrarse ajenos a la realidad.
Dicho lo anterior simplemente quiero terminar esta pequeña aportación diciendo que me gustaría mucho que esto que inicio hoy exista durante un largo periodo de tiempo, y que, de terminar ante ojos de asiduos lectores procuraré, con mayor responsabilidad, expresando continuamente.
No hay comentarios.
Publicar un comentario
Se agradecen tus comentarios.