La vida te enseña lentamente muchas cosas. La que nunca terminas de conocer es la experiencia misma de vivirla. Cuando era pequeño, me imaginaba en estos tiempos trabajando arduamente para alguna grande institución, sí, aunque no lo parezca por cómo me expreso hoy de esas instituciones públicas y sus formas tan patéticas de trabajar, yo algún día quise ser parte de...
De hecho, en algún momento de mi vida me vi a mí mismo como político; debo mencionar que la política nunca la he considerado algo malo, pero hoy sí que me asustan los cuidadanos que la hacen, y cómo la manipular a su favor.
Otra de mis visiones acerca de mi futuro fue verme vistiendo una bata blanca, pero jamás me vi de médico, siempre he respetado a los que profesan eso para lo cual no siento haber nacido. Me veía como un investigador, científico, seguramente por ser en ese tiempo la televisión mi principal fuente de información y parecer que esos tipos hacen las cosas más formidables, que probablemente las hagan.
Hoy, medito un futuro cercano a dispositivos electrónicos computarizados, en medio de los cuales tendré que saber desempeñarme; un futuro complicado y bastante competido, donde hasta el más ingenuo pequeñín será capaz de humillar todas mis habilidades; haciéndome recordar esas escenas de Heroes, donde Micah, a su corta edad tenía capacidad de controlar las máquinas a su antojo. Probablemente no sea tan formidable el suceso en nuestro devenir (cual quién sabe si llegue); sin embargo, los niños dasde algunos años atrás parece han llegado con un microprocesador más adaptable a las nuevas tecnologías.
Mientras nosotros estudiamos los lenguajes de programación y quizá los más capaces desarrollen los propios, probablemente esos chamacos van a poder comunicarse con ellos sin dificultad. Espero Dios me de vida para poder apreciarlo con mis ojos.
De hecho, en algún momento de mi vida me vi a mí mismo como político; debo mencionar que la política nunca la he considerado algo malo, pero hoy sí que me asustan los cuidadanos que la hacen, y cómo la manipular a su favor.
Otra de mis visiones acerca de mi futuro fue verme vistiendo una bata blanca, pero jamás me vi de médico, siempre he respetado a los que profesan eso para lo cual no siento haber nacido. Me veía como un investigador, científico, seguramente por ser en ese tiempo la televisión mi principal fuente de información y parecer que esos tipos hacen las cosas más formidables, que probablemente las hagan.
Hoy, medito un futuro cercano a dispositivos electrónicos computarizados, en medio de los cuales tendré que saber desempeñarme; un futuro complicado y bastante competido, donde hasta el más ingenuo pequeñín será capaz de humillar todas mis habilidades; haciéndome recordar esas escenas de Heroes, donde Micah, a su corta edad tenía capacidad de controlar las máquinas a su antojo. Probablemente no sea tan formidable el suceso en nuestro devenir (cual quién sabe si llegue); sin embargo, los niños dasde algunos años atrás parece han llegado con un microprocesador más adaptable a las nuevas tecnologías.
Mientras nosotros estudiamos los lenguajes de programación y quizá los más capaces desarrollen los propios, probablemente esos chamacos van a poder comunicarse con ellos sin dificultad. Espero Dios me de vida para poder apreciarlo con mis ojos.
La vida te enseña lentamente muchas cosas. La que nunca terminas de conocer es la experiencia misma de vivirla. Cuando era pequeño, me imagi...